La FDA (Food and Drug Administration, de EE.UU.) avisa de que la inyección involuntaria de un relleno dérmico en los vasos sanguíneos de la cara puede causar lesiones graves. Además pide a los productores que actualicen el etiquetado para indicar este riesgo.
Determinados rellenos de tejidos blandos, también llamados «rellenos dérmicos», implantes faciales inyectables o rellenos de arrugas son aprobados por la FDA para reducir la aparición de arrugas o para aumentar labios o mejillas. Los rellenos de tejidos blandos se inyectan directamente en el área de tratamiento. Los resultados exitosos dependerán de la salud general del paciente y del estado de la piel, de la habilidad del profesional de la salud, de la localización de la inyección y del tipo de relleno utilizado.
La FDA está advirtiendo a los profesionales de la salud y al público en general sobrela posibilidad de que puedan producirse lesiones, infrecuentes, pero graves, como consecuencia de una inyección involuntaria de rellenos de tejidos blandos en los vasos sanguíneos de la cara.
«Los rellenos de tejidos blandos deben ser inyectados únicamente por profesionales de la salud que dispongan de la formación y experiencias apropiadas y que sean perfectos conocedores de la anatomía de y alrededor del área inyectada», dice la FDA.